Viaja siempre en el furgón de cola desde que nació (Palma, diciembre de 1977). Es decididamente indeciso. Quiso ser periodista y se licenció en Publicidad y RR. PP., pero acabó enamorándose del papel en Diari de Balears (D. E. P.), donde su mayor logro fue conseguir un autógrafo en lugar de una exclusiva. Toca la batería en el coche y sigue comprando cedés. Perdido en Pollença, en el norte de Mallorca, desde 2014 por Marga y desmontado a diario por Paula, Olivia y Marc, cuida un pequeño huerto sin pretensiones que milagrosamente sigue dando frutos. «No sabía que fueras tan mallorquinista», le dijeron una vez; «yo tampoco», respondió. Disfrutó muchísimo en Segunda B, adonde no querría volver, y defiende que lo más importante en el fútbol es la vida. Este es su primer y último libro.
¿De verdad era así? ¿Estaba realmente disfrutando «mucho» de aquello? Me encontraba allí de pie, de madrugada, solo y a la vez rodeado de amigos, viendo en directo a...
¿De verdad era así? ¿Estaba realmente disfrutando «mucho» de aquello? Me encontraba allí de pie, de madrugada, solo y a la vez rodeado de amigos, viendo en directo a un...